Mensaje del Arzobispo
Desmond Tutu, Presidente de la Comisión
de la Verdad
y Reconciliación de Sudáfrica.
Transmitido a través
del Dr. Richard Lyster, miembro de la Comisión
de la
Verdad y Reconciliación de Sudáfrica, a cargo
de las oficinas de Free State y Natal. Huamanga, 8 de abril
de 2002.
Queridos amigos, hermanas y hermanos en el bello Perú:
Les envío un saludo caluroso en este día de
tan profundo significado en la historia de su país,
al momento de dar inicio a las primeras audiencias públicas
de la Comisión de la Verdad y Reconciliación.
Hago llegar mis saludos a través de uno de mis estimados
colegas, miembros de la Comisión de la Verdad y Reconciliación
de Sudáfrica. Él encabezó nuestras operaciones
regionales en un área muy turbulenta de nuestro país,
que había sido escenario de mucha violencia y derramamiento
de sangre en los años previos a las históricas
elecciones de 1994. Por ende, él lleva a su Comisión
no sólo una rica experiencia, sino un profundo sentido
de compasión por las víctimas y de comprensión
por los motivos de los victimarios.
Están por embarcarse en una difícil travesía,
que les llevará -a ustedes y a su sociedad- a los más
oscuros rincones del espíritu humano. Descubrirán
ustedes cosas de su sociedad que hubieran preferido no descubrir
y escucharán cosas que hubieran preferido no escuchar.
Pero por difíciles que sean, es de vital importancia
que estas cosas sean escuchadas, porque es sólo diciendo
la verdad que podemos empezar a perdonar y a reconciliamos.
Es
una oportunidad crucial, y oramos porque les ayude a lograr
para su sociedad una época de sanación, perdón
y reconciliación. Oramos porque ustedes lleguen a conocer
también aquello que nosotros descubrimos en Sudáfrica:
que las personas son fundamentalmente buenas y admirables por
su magnanimidad, generosidad y nobleza de espíritu.
Que Dios les bendiga en abundancia al iniciar esta noble empresa.
Arzobispo Desmond Tutu
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