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Segunda Sesión, 25 de setiembre de 2002, 3 p.m. a 6 p.m.

CASO 11. Testimoniante Alfonso Salas SO 1ª PNP

El Señor ALFONSO SALAS Sub-Oficial Técnico de Primera de nuestra Policía Nacional en situación de retiro, muchas gracias por haber venido a esta Audiencia, estamos seguros que su testimonio, como el mensaje que llevará no solamente va ser visto por todo el Perú en general, sino particularmente por la familia policial.
Por lo tanto, su testimonio es esperando porque seguramente va tener mucho que ver con el camino de la Reconciliación Nacional, lo invitamos a usted señor Sub Oficial Técnico de Primera Policía Nacional Alfonso Salas para que haga uso de la palabra.

Gracias muy amable.

Testimoniante Alfonso Salas:
Estoy aquí ante ustedes amigos de todo el país, en especialmente de Trujillo y ante Dios, para darle mi testimonio. Este testimonio ojalá sirva, para que todos nosotros hermanos peruanos, juntos empujemos el carro figurativamente para ayudar a reconstruir nuestro país y olvidarnos de que en algún tiempo nosotros los peruanos fuimos enemigos alguna vez, espero que eso no vuelva a ocurrir, es por eso que estoy presente para darles mi testimonio.
Soy Sub Oficial Técnico de Primera Eduardo Salas Málaga, ingrese a las filas de la Policía pensando ayudar a mis hermanos una de mis convicciones fue ser un buen policía pero creo que hasta el día de hoy he logrado esa meta. Ingrese a la Policía en el año de 1983, en el Centro de Instrucción de la Policía de Investigaciones del Perú, después de un año de instrucción salí a trabajar en 1984 y fui destacado a la provincia de Jaén, a la Jefatura Provincial de Jaén de la Policía de Investigaciones en ese momento, hoy Policía Nacional del Perú.
Desde el año de 1984 hasta 1990 creo yo que logre parte de lo que quise hacer, estuve en esos años combatiendo la delincuencia común, y en ese tiempo afloraba ya, lo que era las intervenciones subversivas por terroristas de Sendero Luminoso. En el año de 1986, gracias a mi esfuerzo pensando en mi y pensando en mi familia y pensando en llegar a ser un buen policía fui denominado el Policía del año de la Región Norte de esta parte del Perú, y en esa fecha llegue a casarme con la mujer que hoy vive conmigo, gracias a Dios la tengo a ella.
Hoy también ha venido conmigo, ella es la que me apoya y esta conmigo siempre, transcurrido los años y la zozobra que vivía en la ciudad de Jaén, diariamente había apagones, pero no porque se cortaba una falla eléctrica sino porque había mucho accionar terrorista, como dicen se la habían agarrado con las Empresas Eléctricas, porque todas las noches vivíamos en tinieblas, no hubo una noche en que no hubiera habido un apagón y vivíamos en ese tiempo mi esposa y yo y mi pequeño hijo, ella con el temor de que me podría pasar algo.
Pero yo le decía no, esto es lo que yo he decidido vivir y ya tienes que estar conmigo para todo lo que pueda venir, en el año de 1990 fui trasladado como cambio de colocación a la ciudad de Lambayeque, ahí me designaron ir al GOL, el GOL significaba el grupo operativo de Lambayeque de la Policía de Investigaciones de ese tiempo, estuve solamente 1 mes, pero durante ese mes viví lo más fuerte, dentro de mi profesión lo más duro que pude vivir, un ataque subversivo.
Me encontraba de servicio el día 8 de Septiembre de 1990 el Servicio de Seguridad Local que nos habían dado para trabajar era un local de los Registros Electorales nos habían dado en forma de alquiler a la Policía para que nuestra presencia como Policía de Investigaciones esté ahí, porque nosotros nos dedicábamos a combatir el delito tanto con apropiaciones ilícitas, violaciones abusos y todas estas cosas, recibíamos las denuncias de las personas que vivían por ahí, esto era nuestro trabajo.
Y resulta que el día 08 de Septiembre de 1990 me encontraba en servicio siendo aproximadamente las 12 de la noche estuvimos con nuestro armamento de reglamento cumpliendo el servicio de seguridad local, uno de mis promociones de Escuela y Yo, estuvimos aproximadamente hasta las 3 de la mañana, y como decíamos nosotros no pasaba nada, todo estaba en calma esa noche, tanto que siendo las tres, tres y media de la madrugada nosotros los policías siempre tenemos que hacer un documento dando cuenta a la superioridad sobre los hechos ocurridos en el día, cuando viene una persona asienta una denuncia, todo esto tenemos que demostrarlo mediante un documento que se llama parte policial.
Nos dedicamos a confeccionar el parte policial dentro del local y después de media hora que estábamos confeccionando este documento, escuchamos un ruido en la parte posterior del local, yo como más antiguo de los dos, porque éramos solamente dos los que prestábamos servicio esa noche, le digo Coleguita anda a ver que es lo que esta pasando en la parte posterior como les decía antes, no hizo su ronda y cuando regresó me dijo todo esta en calma.
Debe haber sido gato un animal que a veces por esa parte posterior de la Jefatura había bastantes de esos animales, entonces, ya le digo hay que seguir haciendo el documento, luego pasó otra media hora y escuchamos otro ruido por la parte de delante de la Jefatura, luego salió él y estuvo como media hora haciendo su ronda y de nuevo ingresó y dijo no hay nada. Y yo le dije hay que tener cuidado hay que estar atentos, ya me dice no te preocupes, tenía nuestro armamento al lado de la silla donde estábamos confeccionando el documento y a los 15 minutos nos sorprendió una explosión.
Entonces la honda expansiva de la explosión derribo la puerta de metal que tenía el local y esa puerta me cayo encima de mi pierna, la cual la destrozo, hoy uso una prótesis que me ha dado la sanidad de la Policía, pero en ese momento no me di cuenta, porque era todo confusión, se había caído el techo de la Jefatura en mi cabeza causándome esta herida que tengo, me encontraba ensangrentado, miraba mi pierna estaba ensangrentada, y mi otra pierna también estaba ensangrentada.
Cuando volteo de repente hacia atrás porque yo me había caído al piso, lo veo a mi colega también tirado también en el piso y me dije Dios mío que ha pasado, que es lo que esta sucediendo, cuando regreso mi cabeza hacia el frontis de la Jefatura entre la polvareda del momento vi que dos personas se acercaban hacia mí rápidamente, los veía con algo en la mano, veía sombras, pero me di cuenta de que tenían algo en la mano, como nosotros decimos un armamento no, y yo me dije no creo que sean mis colegas que venga a auxiliarmente tan rápidamente.
Entonces dije estos son terroristas, vienen a rematarnos como decimos nosotros los policías a darnos el tiro de gracia, entonces para defenderme quise levantarme pero no pude, cuando puse mi brazo hacia atrás para hacer este movimiento me caí y cuando volví a ver mi pierna el hueso ya me colgaba de la pierna. Dios mío dije que me ha pasado, y en esos instantes en cuestión de segundos como les vuelvo a repetir vi que una sombra se me acercaba y dije estos me vienen a rematar, no puede ser, como tenía mi metralleta en la mano, solté una ráfaga de balas para ahuyentar a esa gente y lo logré, al ver que ya se habían retirado me desmayé y caí inconsciente, el resto de lo que ha ocurrido solamente me lo han contado, porque yo perdí el conocimiento, y de eso ya no supe nada.
Pero lo que ellos me han contado, me dicen que los vecinos que vivían al frente del local policial me habían auxiliado, me cargaron me llevaron en una camioneta y me llevaron al Hospital de las Mercedes, donde me prestaron los primeros auxilios, y gracias a Dios y gracias a Dios digo yo, porque el médico que se encontraba de servicio en esos momentos era el tío de mi esposa, él me auxilio, me paro la hemorragia que tenía en la pierna izquierda y ordenó que me evacuaran a la ciudad de Chiclayo, me llevaron al Seguro Social.
En el Seguro Social no me quisieron atender, no me quisieron recibir prácticamente yo ya estaba hecho un cadáver, no reaccionaba y como en todo local así de Hospitales o algo del Estado siempre hay un servicio que presta servicios. El indico a la gente que estaba en la Sala de Emergencias le dijeron este llévenlo a la Sanidad porque él pertenece a la Policía, entonces en ese momento me trasladaron durante todo ese tiempo que había transcurrido desde las 4 de la mañana hasta ese momento ya eran como las 6 de la mañana.
El día 9 de Septiembre había caído un día domingo y los días domingos mayormente la gente no trabaja y solamente en la salida se encontraba un médico de servicio, y al llegar yo a la Sala de Emergencia le preguntaban al médico donde podían encontrar a los demás médicos para que me atendieran, porque yo prácticamente ya me estaba muriendo y por suerte los médicos se encontraba haciendo deporte a veces los domingos uno necesita soltarse no, de toda la semana que uno trabaja.
Y con la ayuda de los jefes que en ese momento se encontraban fueron y los trajeron de los campos deportivos a los médicos y ingresaron a la Sala de Operaciones, así con ropa de deporte y fue que me atendieron, entonces uno me estaba viendo la parte de la pierna que ya estaba destrozada y era imposible recuperarla ya, porque llegaron a amputármela, otros me veían la parte de la cabeza y otros de la pierna de la derecha porque también tengo una herida, y gracias a Dios, y gracias a la intervención de mis jefes pudieron salvarme la rodilla, porque para los doctores hubiera sido más práctico haberme cortado desde la rodilla para arriba, y haberme cocido y problema solucionado para ellos no.
Pero gracias a los jefes que pusieron empeño, en que no me cortaron toda la pierna me salvaron la rodilla y parte de la pierna hacia abajo, es por eso que hoy uso prótesis y puedo desplazarme en forma más cómoda, pero una vez que me intervinieron los doctores. Mi esposa se encontraba de 8 meses de gestación y no le querían dar la noticia, sabía ella si, que había sufrido un atentado terrorista, pero no le querían decir que me habían amputado la pierna, porque en el estado que se encontraba ella de 8 meses de gestión le podía haber sucedido a ella algo, pero gracias a Dios no.
Dispusieron de que dos psicólogos estuvieran permanentemente con ella, y que poco a poco le fueron dando la noticia de que ya me habían amputado la pierna izquierda, después de 2 días que me encontraba en la Sanidad de Chiclayo me trasladaron a la ciudad de Lima al Hospital Central de Policía, donde tuve varias intervenciones quirúrgicas a parte de lo que me había sucedido tuve como 2 a 3 intervenciones tanto de la pierna izquierda como de la pierna derecha y en esta parte que ustedes podrán apreciar yo tengo una cicatriz hasta esta parte de la cabeza.
Me sentí bastante afectado no quería saber nada de lo que era recuperación ni nada porque aparte del estado en que me encontraba mi esposa estaba por dar a luz y gracias a esa niña que nació, puse empeño en tratar de recuperarme en todo momento, como les vuelvo a decir trate de recuperarme por mis hijos pero esas heridas tengo yo presente de que todavía no se han cerrado, quizás físicamente ya uso una prótesis, tengo cirugías que me han hecho en la pierna derecha, pero dentro de mí las heridas todavía están como se dice ahí latentes.
Pero es que hoy, que les estoy dando mi testimonio me estoy sintiendo mejor, esta tensión que siempre he vivido y no he podido contarla. Quizás muy pocas personas conoce de esto y bueno la Policía tiene que saber, pero es en forma reservada, es que hoy si estoy presente acá para darles mi testimonio es porque quiero de que todos nuestros hermanos peruanos en esa época los subversivos en esa época la Fuerza Armada, la Policía Nacional, sirva este testimonio para que estemos unidos quizás este dando un granito de arena para que cambie la situación de esos años y que vaya mejorando en el transcurso de estos años.
Con la Comisión que tienen ustedes que me parece que esta muy bien y que esto va lograr que todos nuestros hermanos peruanos estemos empujando el carro de la unión entre peruanos y que yo se que hay montón de heridas, no de gente que como yo viene a dar su testimonio y no se, si se sentirá mejor o peor, quizás pero tratemos de esto que están haciendo la Comisión de la Verdad que de la reconciliación sirva para que en nuestra mente cambie esa manera de pensar, tanto de nosotros como de todos los peruanos.
Y hoy como les digo dando mi testimonio me siento un poco mejor y si esto sirve para lograr algo mejor en buena hora, convoco a todos ustedes para que tanto como me han escuchado a mi o a gente que ha sufrido nos pongamos la camiseta del Perú y tratemos de avanzar hacia el futuro de nuestros hijos y de todas las personas que quieren algo nuevo para nuestro país. Esto es todo lo que les pudo decir y le agradezco mucho el que me hayan invitado señores de la Comisión de la Verdad y si desean hacerme alguna pregunta o quisieran conocer algo más estoy dispuesto a responderle. Muchas gracias.
Señor Alfonso Salas, Sub Oficial Técnico de Primera de nuestra Policía Nacional del Perú todos sus compañeros de promoción de lo que fue el código 2 seguramente lo escucharan por Televisión y estarán contentos de haber percibido usted no solamente el testimonio de lo sucedido defendiendo el puesto policial al que hace usted referencia sino el mensaje de búsqueda de reconciliación entre todos los peruanos.
Porque creo que es lo más importante, además de lo que usted ha dice se siente usted mejor de haber venido a esta Comisión y haber dicho lo que ha dicho, muchas gracias a usted y al Oficial que lo acompaña y a los miembros del Ministerio del Interior que han hecho posible para esta entrevista muchas gracias.


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